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Foto del escritorJavier Cone

Arreglemos unos gráficos

Gráfico 1

El primer gráfico fue mostrado por la corporación pública RTVE en 2013 y, como indica el enunciado, muestra la caída del desempleo en España en agosto del mismo año. En concreto, la gráfica muestra la cifra de febrero y de agosto con un gráfico de línea, y está acompañada del rótulo “Pargo registrado 2013”, que la titula. A partir de aquí, ¿qué está mal?

A primera vista, llaman la atención la escala de la gráfica. Desconocemos el valor que representa la línea base. Al no estar marcado y viendo la gran caída de la línea, podemos pensar que se trata del habitual, 0. Sin embargo, al comparar las cifras (5.040.222 menos 4.698.783 indican una bajada de 341.439) comprendemos que la línea base no puede ser 0, puesto que entonces el gráfico estaría claramente manipulado.

Si el valor de esta línea base fuese 0, la distancia entre el punto de agosto y la línea X representaría más de 4 millones y medio, mientras que la diferencia, visiblemente mucho mayor, entre febrero y agosto representaría menos de medio millón. Lo exagerado de esta posible manipulación nos lleva a pensar que el gráfico está representando solo una porción, y que realmente el punto de partida es algo similar a 4.500.000. Teniendo en cuenta el rango en el que se mueven las cifras de paro de España y, en concreto, las de ese periodo, parece lógico partir de una cifra determinada y no de 0, lo que dejaría un espacio inutilizado en la parte inferior y acumularía la gráficen la inferior. Entonces, si suponemos buena fe en la selección de la escala, ¿por qué no se ha indicado que, en efecto, la línea base representa un valor de, al menos, 4’5 millones? La falta de este dato convierte el gráfico en un elemento muy dudoso, en el que la caída se ve exagerada e interpretada casi como un “de 5 millones a menos de 1”.


El segundo fallo más llamativo, como ya dijimos, es la selección de los meses representados en el eje X. Entre febrero y agosto existe un semestre, periodo usualmente conocido por todos y que representa, además, medio año. Realmente esto no supone ningún problema, pero dificulta que el espectador pueda interpretar los datos como un todo, al no aparecer, ni siquiera marcados con líneas, el resto de meses del año. Sería especialmente interesante que apareciese marzo, ya que el punto de mayor desempleo del año parece haberse dado entre el segundo y el tercer mes. Cuando el rótulo que titula el gráfico habla de “Paro registrado 2013”, se echan aún más en falta esas pequeñas líneas que nos ayudarían a situar los datos del resto de meses del año.


Y, hablando de rótulos, vamos a un tercer punto que cobra especial relevancia al estar hablando de un informativo de televisión, es decir, de un formato en el que el tiempo en pantalla es sumamente limitado. El rótulo habla de “Paro registrado en 2013”, y el enunciado de una “celebración de la caída del desempleo en España”. La falta de información sobre el valor de la línea base, sumado a un locutor hablando de caídas del desempleo y a un gráfico mostrado durante escasos segundos y que no podemos volver a consultar sobre la marcha pueden producir un efecto engañoso. Nuestra mente va a relacionar la línea base con el valor inicial habitual, 0, y lo pronunciado de la curva, la información contada y lo rápido del procesamiento de la información pueden hacer que percibamos la caída como algo mucho mayor, más cercano a cero que a los 5 millones de los que partíamos. Vemos que tan importante como el texto que acompaña a un gráfico en la prensa digital o escrita, lo es la locución y explicación del presentador en televisión. Y si esta no está a la altura y, además, el gráfico contiene errores básicos de representación, la información transmitida puede ser absolutamente falaz.


Quitando los que, bajo mi punto de vista, son los mayores errores del gráfico, aún podemos hablar de otros tantos. Quizá estos no afecten de forma grave a la comprensión, pero sí podrían ayudar a mejorarla. Por ejemplo, el verano es un periodo en el que, habitualmente, aumenta la contratación temporal y disminuye el desempleo. También lo hace habitualmente en Navidad y Semana Santa, aunque con menores variaciones. ¿Podríamos incorporar esta información, si no en el gráfico principal, en uno secundario? Sería interesante observar la caída en el verano de 2013 respecto a la de años anteriores: ¿se está creando el mismo empleo? ¿es empleo estable o los datos de paro repuntan históricamente en septiembre? Viniendo de años de crisis económica, sería interesante ver la evolución de los últimos 5 años, comparando el paro en agosto de 2013 con el de 2012, 2011, 2010 y 2009, por ejemplo.


Otra información de interés podría ser el porcentaje de paro sobre el total de población activa, fácilmente comprensible para muchos espectadores, o la inclusión de una información que suele acompañar a la del desempleo y es un buen termómetro de la situación laboral: el número de afiliados a la seguridad social. Por último, y esto solo para frikis de los datos, incorporar a RTVE.es una ampliación de estos gráficos con aspectos como las caídas en el desempleo (y no solo el bruto del número de parados) ayudaría a quien lo deseara a profundizar en la información.


Una propuesta…

En mi propuesta de gráfico, he mantenido la idea de movernos en un cuadrante más cercano a las cifras que mostramos, bajando el valor de la línea base a 4 millones. Indicando esta cifra, 5 millones y la intermedia correctamente y dejando ese espacio de 500.000 de aire, ayuda a que en un primer vistazo sepamos que nunca nos acercamos a 0 con los datos, haya subidas o bajadas.


He introducido todos los meses, marcados con puntos y en el eje X. Febrero y agosto de 2013 aparecen marcados de manera especial y con la cifra de desempleados, como en el original. De esta forma, podríamos incluso prescindir de los nombres de los meses bajo el eje X. También he incorporado los datos de 2012. Al hacerlo he comprendido que, probablemente, ni se pasara por la cabeza incluirlos, ya que en general reflejan un aumento del desempleo de 2013 respecto al de 2012, y que la mayor caída se dio precisamente tras la caída del verano anterior.


Por último, he cambiado el rótulo y título del gráfico a uno más claro: Desempleados en España, 2012-2013. Entiendo que el término paro es más conocido, y puede ser utilizado por el presentador, pero el dato que realmente refleja el gráfico es el número de desempleados en el país.


Gráfico 2

El segundo gráfico es obra del Partido Popular, formación en el gobierno en el año 2013. Atendiendo a su título y a los datos, muestra la “Variación del precio de la luz” (eléctrica) entre 2006 y octubre de 2013. A partir de aquí, ¿qué anda mal?

La primera sensación al ver el gráfico puede ser la de que es confuso. Si entendemos que “precio de la luz” se refiere al “recibo de la luz”, y no al “coste de la energía”, estamos hablando de un concepto complejo. En España está definido por el coste de la energía y los costes del sistema eléctrico (llamados peajes). Nos habla de variación, es decir, de subidas y bajadas, pero no de precio total. La línea base muestra un 0% y no un precio, por lo que podemos entender que estas subidas se van acumulando (si la luz sube un 1% en 2011 y pasa de 100€ a 101€, al subir un 5% en 2012, pasará a 106’05€). Nos habla, además, en porcentajes, sin establecer ninguna cantidad económica. Cuando hablamos de economía doméstica, a gran parte del público puede resultarle complejo calcular porcentajes, por lo que las barras se van a convertir en una referencia mucho más accesible que la los tantos por ciento.


Y es aquí donde entra, precisamente, el aspecto más confuso del gráfico: junto a 7 barras de tamaño similar, aparecen 5 barras más pequeñas que nos hablan de 5 meses de 2013 en los que, además, se registran las menores subidas (y la única bajada) del gráfico. ¿Qué ha pasado aquí?


Empecemos por los meses. En principio puede parecernos que el gráfico recoge 5 meses porque ha sido publicado en mayo o junio de 2013, pero vemos que aparecen julio, agosto y octubre. Por lo tanto, parece que se han seleccionado estos meses según otro criterio. Encontramos enero, abril, julio y octubre, es decir, el primer mes de cada trimestre. Una elección extraña pero con cierta lógica… sobre todo cuando descubrimos que los precios de la luz se fijan justamente al principio de cada trimestre. Entonces, ¿qué falla? Agosto de 2013. Ese mes hubo una nueva subasta y un precio diferente solo para sus 31 días. Sin embargo, si no lo explicamos -de hecho, el siguiente párrafo obedece a mi interpretación antes de conocer esta información-, el dato genera una suerte de aleatoriedad en los elementos mostrados que puede descolocar, al menos hasta que contamos el número de barras de cada color.


Porque pasamos a ver qué nos muestra cada barra. Tenemos 6 años de gobierno socialista representados en 6 barras, y 2 años o menos de gobierno popular representados en otras 6 barras. Con esto, la selección de 5 meses no correlativos para representar a 2013 va cobrando cierto sentido, aunque no sea en positivo. Aquí surgen muchas preguntas: ¿qué encontraríamos si 2013 fuese una sola borra y reflejara todos los datos del año? ¿se rompería la tendencia al alza que experimenta el precio de la luz desde 2010? ¿han comenzado el resto de años también con subidas menores y bajadas, o se está marcando un hito en 2013?


Y hay una pregunta más -entre otras tantas-: ¿Es lógico comparar 6 años de PSOE por 2 de PP? El Partido Socialista gobernó entre 2004 y 2011, sin embargo, se ha cogido su segundo gobierno al completo y solo parte de su primer gobierno, por lo que el gráfico recoge, incluyendo las barras azules, el extraño periodo de 8 años. Incluyendo los dos años anteriores y, de paso, todo el primer gobierno socialista, tendríamos un periodo mucho más común de una década. Así, quizá, podríamos pensar que se quieren comparar los datos de la última década, o los datos de todo el periodo de gobierno socialista en la última década con los del gobierno popular. Lo curioso es que, introduciendo esos 3 años extra en rojo, se comparte que los dos datos completos anuales más bajos se dieron justamente durante gobiernos progresistas, mientras que la mayor cifra registrada es la de 2012, ya con el PP en el gobierno. Una ejecución extraña e incluso torpe, que nos lleva a pensar que el único punto al que se ha prestado atención en la elaboración del gráfico ha sido en esa división de 2013.


Hay un punto que, por lógica, debería haber señalado antes. Pero pido permiso para no respetar el orden lógico en esta crítica para explicarlo justo al final. Y así, antes, centrémonos en qué hace incompleto al gráfico. En el anterior, hablábamos de aspectos que pueden influir en la caída del desempleo de un mes de agosto. Aún así, en ese caso, no incluir esas referencias no afectaba gravemente a la comprensión de la información. En este caso, hablando de precios, y más de un bien tan complejo como la energía eléctrica, sí hay fallas o faltas que desembocan en un empobrecimiento grave de la información y la comprensión. Entre ellos:

  • Cuando el gráfico habla de “precio de la luz”, ¿se refiere al precio en el mercado regulado, es decir, al de la TUR o tarifa de último recurso?

  • ¿No resulta lógico que ciertos bienes aumenten de precio? ¿Por qué no comparar con el IPC o con el poder adquisitivo de la población?

  • ¿Ha habido cambios legislativos en estos años? ¿Cuál es la política impositiva en cada caso?

  • ¿Se explica el peso de las energías renovables en las variaciones del precio?

Como vemos, un simple gráfico como este no nos ayuda a saber que entre 2012 y 2013 el recibo de la luz experimentó fluctuaciones que no se correspondían con el costo de la energía ni con la tarifa de último recurso: cambios impositivos, una sentencia del Tribunal Supremo que obligó a refacturar, etc. Cuando no hablamos de precio total, sino de variaciones en el precio, los datos fríos nos pueden dejar perdidos.


Ahora sí, vayamos a uno de los mayores defectos del gráfico: ¿Por qué abril de 2013, casualmente la única bajada del gráfico, no tiene cifra? Entendemos que ese mes el precio de la luz bajó más de un 5%, quizá un 6,5% o incluso 7%. Leyendo posibles razones, vemos que, en efecto, en abril de 2013 bajó un 6,7% debido a las fuertes caídas en la subasta eléctrica del mes anterior. Estos precios bajaron hasta un 15%, pero la composición del recibo de la luz, que explicamos anteriormente, rebajó la bajada hasta el 6,7. Por cierto, ¡este dato nos ayuda a saber que, efectivamente, se estaban refiriendo al recibo de la luz en la Tarifa de Último Recurso!


Una propuesta…

Tengo dos propuestas para mejorar este gráfico. Una respeta la concepción del original: mostrar la variación en el precio o recibo de la luz. La otra se centra en el precio medio anual de la luz.

Aquí respeto su idea de comparar las variaciones durante los dos gobiernos. No obstante, he cogido un periodo más natural (5 años), introduciendo una división que puede dar más información, la de coste de la energía y coste del peaje (en este caso, las he puesto siempre al 50% al desconocer los datos), y agregando las cifras de 2013 (las de los meses que conocíamos, al no poder encontrar las variaciones de todo el año). También he modificado el título por uno más asimilable (recibo de la luz) y señalando que hablamos del mercado regulado.


A continuación, propongo algunos gráficos que reflejan el asunto de una forma, bajo mi punto de vista, más interesante. Algunos son de referentes, mientras que el último ha sido desarrollado por mí partiendo de información de Facua.

Estos gráficos de Statista y Aura nos hablan del precio de la electricidad en euros por megavatio/hora y en euros por kilovatio/hora, respectivamente. Además, el de Statista lo hace de forma anual, entre 2010 y 2020, y el de Aura en formato bimensual, de abril de 2014 a agosto de 2016.


Al hablar del precio de la electricidad, nos resulta más fácil comparar en qué años la misma estaba más cara en España, y qué años bajó. Esto nos abre una puerta de posibilidades: comparaciones con el IPC, relaciones con las energías renovables, etc.


Y, precisamente hablando de precios, dejo mi última propuesta. He cogido el precio por usuario medio incluyendo coste de la energía, peajes e impuestos, con el cálculo que se realiza al inicio de cada trimestre. Para seguir mi anterior propuesta, he seleccionado un periodo de 5 años. Este es el resultado:

Podría ampliarse mucho más en este gráfico incorporando información como la que comentamos anteriormente.


Referencias

  • Aura Energía (s.f.). Página web. www.aura-energia.com.

  • Cairo Touriño, A. (s.f.). Análisis y visualización de datos. Recuperado de www.uoc.edu

  • El País (2020). Intrahistoria de ‘Un salón, un bar y una clase’. El País. Publicado el 6 de noviembre de 2020. Recuperado de www.elpais.com

  • Facua (2013). Evolución del as tarifas eléctricas entre 1993 y 2013. Recuperado de www.facua.org

  • Ferrer Morini, T. (2014). “El tener más datos no quiere decir que haya mejor información”. El País. Publicado el 26 de octubre de 2014. Recuperado de www.elpais.com

  • Libre Mercado (2013). La luz bajará un 6,7% a partir de abril. Libre Mercado. Publicado 20 de marzo de 2013. Recuperado de www.libremercado.com

  • Malaprensa (s.f.). Página web. www.malaprensa.com

  • Sevillano, J. (2020). Evolución de las tarifas eléctricas. Recuperado de www.javiersevillano.es

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